El apocalipsis zombie es probablemente una de las amenazas más cercanas que se plantea en el horizonte empresarial a corto plazo. La elaboración de planes de contingencia en la que los empleados de una empresa puedan responder de forma eficaz a un escenario de apocalipsis zombie es una de las prioridades de cualquier sociedad mercantil que quiera continuar sus procesos productivos en este tipo de situaciones y poder continuar con la generación de beneficios.
Apocalipsis Zombie
Entendemos por apocalipsis zombie aquella situación de compromiso cierto de la continuidad de la civilización humana originada por la resurrección masiva e incontrolada de cadáveres humanos.
Abogado Amigo hemos encargado a uno de los mayores expertos en apocalipsis zombies la preparación de una Guía de supervivencia al Apocalipsis Zombie. Recomendamos su lectura a todos aquellos que quieran mejorar y superarse en un entorno hostil. Puedes descargarlo fácilmente simplemente utilizando los botones sociales que aparecen justamente debajo. Gracias por compartirlo en redes sociales.
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Guia de supervivencia al apocalipsis zombie
El zombie como sujeto de Derechos
La regulación actual del cadáver como «res extra commercium» es evidentemente insuficiente para el apocalipsis. A pesar de que la personalidad jurídica se extingue con la muerte, la resurrección del zombie nos permite identificar en él aspectos fundamentales de la personalidad a efectos jurídicos. Una vez resucitado, el zombie es sujeto de deseos de querer y de entender. Cierto es que sus punciones naturales son sentidas de forma mucho más fuerte que para el humano vivo, pero no por ello deja de tener capacidad de elección.
Reconociendo personalidad jurídica al zombie, deberíamos plantearnos si sus actos son penalmente relevantes. Obviamente la necesidad de alimentación obteniendo cerebros humanos es para el zombie una fuerza irresistible que será utilizada seguramente por muchos abogados zombies para evitar la condena a sus representados. No obstante, y reconociendo esa llamada a la alimentación, no podemos olvidar que el zombie en su búsqueda de cerebros humanos, también es capaz de establecer una estrategia, de reunirse con otros y actuar en grupo, de premeditar su forma de actuar y por lo tanto, se resuelve claramente un indicio de su imputabilidad.
Derechos del zombie
El zombie en este punto es titular de derechos y de obligaciones. Más allá de la regulación actual, el zombie necesita de amparo jurídico para el adecuado desarrollo de su personalidad. La concepción del zombie como ciudadano, no sólo como resucitado, permite desarrollar un amplio abanico de posibilidades jurídicas para preservar su patrimonio, sus relaciones familiares y su vinculación con la administración.
Uno de los aspectos más interesantes a estudiar en el marco del apocalipsis zombie es la posibilidad de reconocer herencia legítima en la sucesión de los zombies. Dada la naturaleza particular del nacimiento del zombie, a través de la resurrección de un cuerpo muerto, es difícil poder platear una relación familiar en la forma reconocida por nuestro ordenamiento hasta ahora. La llegada a la vida se produce sin necesidad de padre o madre, basada exclusivamente en la regeneración de la materia inerte. Sin embargo, nada impide que el zombie procree o que celebre matrimonio con su pareja, por lo que esos vínculos sí que deberían estar protegidos para el momento en el que el zombie fallezca, asegurando que una parte de su patrimonio sea destinado a salvaguardar las necesidades de hijos zombie y conyuge zombie respectivamente.
Muy bueno el post, deberían contactar con Manel Loureiro, abogado gallego, y autor de una de las sagas de zombis más famosas actualmente: «Apocalipsis Z». Seguramente podría ampliar el espectro en este campo jurídico inexplorado.
El campo penal es el más relevante, obviamente, yo me planteo alguna duda más procesal… ¿cómo notificas algo a un zombie? ¿dónde tiene su domicilio? ¿tiene derecho al último gruñido?
Como novato en el campo de abogacía, mientras intento hacerme un hueco, no quitaré la vista de este campo, por si surge una oportunidad o nicho de mercado.
Saludos.